Foto: Rosa García NavarroMario Morcillo Moreno. La isla de los delfines
La conservación de las ballenas es complicada porque el mundo desde siempre se ha movido la industria ballenera antes por la iluminación de las ciudades por aceites fabricados con la cera de las ballenas.
Las ballenas se mueven por las corrientes marinas. Las orcas son los delfines más grandes que existen; la distinción se hace porque el grupo de los delfines tienen dientes y una abertura respiratoria.
El estudio se centra en el estrecho de Gibraltar, provincia de Cádiz.
Allí a los lugareños nombran a las hembras de orcas como orcas; mientras que a los machos de orcas los denominan espartes. Significando este término espada medival ancha y grande, como el dibujo que tienen las orcas en su panza.
En el estrecho de Gibraltar dependiendo de las corrientes marinas los atunes y las orcas por consiguiente se mueven de maneras distintas. Los atunes en la primavera acuden al Mediterráneo a desovar, siendo el estrecho un área concentrativa de atunes y por tanto de orcas.
Existiendo un proceso evolutivo llamado acomodación de las orcas a los movimientos migratorios de los atunes que consecuentemente se desplazan en función de las corrientes marinas.
Existen una serie de factores implicados en que el Mediterráneo tenga un nivel más bajo que el océano atlántico haciendo que entre agua desde el atlántico al Mediterráneo. El agua entra superficialmente y sale en las profundidades del estrecho. Para saber un poco más de las corrientes marinas tendremos que remitirnos a un libro de oceanografía física, un atlas marino o algo parecido.
Asi el atún entra superficialmente al Mediterráneo y sale por debajo menos al lado de las costas que existe un fenómeno llamado mareas vivas, hay mareas cada 6 horas y los atunes pasan seis horas por la costa y 6 horas por el centro del estrecho.
Asi se estudian las orcas y se conservan las orcas estudiando y conservando su medio, intentando preservar todo el hábitat que las rodea.
FRANCISCO LLAVERO BERNAL 18/11/09
